Corren malos tiempos, revueltos…
Y seguimos tratando de esquivarlos, sin mucha suerte, la verdad.
Nos dan de frente, de costado y de espalda, que es lo que más duele, cuando no
los ves venir y te tumban, cuando te dejan sin capacidad para reaccionar, para
pensar la respuesta; o cuando te obligan a esperar a que pase el huracán para
poner de nuevo sobre la mesa y boca arriba las cartas que se han caído... ¡Y poder seguir la partida!
Los cielos pasan de nubes a claros, de tormentas a explosiones de
sol revitalizante. Así los ánimos, que no saben muy bien a quién escuchar, si
al corazón o a la cabeza. Razón y sentimiento. ¡Qué difícil!
Tempus Revolutum.
Foto y Texto: Edurne
Pero hay que seguir adelante, más en estos tiempos convulsos. Ser como el junco: resistente y flexible.
ResponderEliminarBesos.
Toma mi mano. Prometo no decir nada, tan sólo acompañarte en este camino tortuoso, para que sientas que no estás solo.
ResponderEliminarBesos.
PEDRO:
ResponderEliminarMe ha gustado eso de ser como el junco: resistente y flexible.
Gracias!
Besos.
;)
PACO:
Gracias por tu apoyo, tu mano y tu acompañamiento silencioso...
Besos.
;)
Sabes, con el tiempo he aprendido que la cabeza gobierna mejor que el corazón...
ResponderEliminarEse tiempo revolucionado también pasará...y vendrán días mejores.
Besos
BLANCA:
ResponderEliminarTodo pasa y todo queda...
Gracias por tus palabras.
Besos y abrazos.
;)
Edurneeeeee, llevo mucho tiempo sin aparecer por el mundo de los blogs y he venido a hacerte una visita . Animo y un abrazo muy, muy fuerte.
ResponderEliminarCHELO :
ResponderEliminarMuchas gracias por la visita y los ánimos.
Espero que a ti sí te vaya todo bien.
Besos.
;)