martes, 24 de enero de 2017

NO HAY DOS SIN TRES


Sabes,
todavía me duelen los pasos
que camino cada día
cuando finjo que mi vida va
de acá para allá,
como un corredor de fondo
con la mirada puesta en la meta.
Me duelen cuando arrastro
por los pasillos de esta soledad inmensa
todas las horas
en que no te tengo
—créeme que las cuento, aita—
26.280, que se convierten
en tres malditos años de ausencia.
Sabes,
cierro los ojos y te huelo,
siento el tacto de tu piel,
oigo tu respiración
igual que un reloj marcando el tiempo…
¡Y tu risa, aita, tu risa!
Que hasta con los ojos te reías,
lanzando un verde de esperanza
que todo lo inundaba.
Sabes,
Por aquí es imposible
llenar tu espacio con nada que
no seas tú mismo
—sé que lo sabes—.
Y que da igual el tiempo que pase,
la lluvia que caiga sobre
nuestros corazones,
los recuerdos que llamen
a nuestra puerta,
o las risas y los llantos.
Da igual, aita,
todo está como tú lo dejaste.
Y tú aquí, con nosotros.
Maite zaitugu, betiko!



Fotos: de la memoria familiar. Texto: Edurne.
Hoy, 24 de enero de 2017, se cumplen tres años desde que mi aitatxu nos dejara.


domingo, 8 de enero de 2017

LUCES DE NEÓN



De nosotros depende

que sigan brillando.

Foto y Texto: Edurne

lunes, 2 de enero de 2017

EN EL NUEVO AÑO


El mundo está ahí, 
listo para que lo vivamos.
Cruce de caminos, 
pasos que vienen y van.
Unos sabrán hacia dónde quieren llegar, 
otros, 
tan solo se dejarán llevar.
Tenemos todo un año para
caminar, 
caminar, 
caminar...

Foto y texto: Edurne