jueves, 31 de diciembre de 2015

LAS UVAS DE LA IRA (Sic.)



Estas son las novenas “uvas de la ira” que tomo junto a todos ustedes desde que comencé esta singladura orillera, allá por el año 2007.  

Puedo decir que siguen siendo “de la ira”, aunque yo no sea de iras ni nada parecido, pero, algo en mi interior se rebela, se levanta en armas ante tanto despropósito de todo tipo, del emocional, del vital y del día a día, del real, del imaginado, del acaecido y acontecido, del que esperas, intuyes y sospechas, y del otro, del que nunca imaginarías que pudiera suceder(te/nos)…

Los años van pasando, como las olas que se suceden una tras otra. Y a veces una se pregunta si no será todo como un mal sueño, si no habrá que esperar a que todo pase y podamos abrir los ojos sin temor a ver lo que nos rodea de verdad. No sé. Siempre fui muy soñadora. Soñadora de sueños con ojos cerrados y ojos abiertos. Y a veces, solo a veces, creí confundir sueño y realidad. Aunque, cualquiera sabe, tal vez sea un sueño lo que vivimos, y lo que soñamos, lo que de verdad vivimos…

En lo personal, estos años se me están atragantando, como las uvas, que nunca pude con ellas. Y cada fin de año me digo que el siguiente será el bueno, el de volver a empezar, el de hasta aquí hemos llegado en las penas, en los sustos y en lo puñetero de la vida. Sí, todos los años albergo la esperanza de que al despertarme en un año más, todo haya cambiado, así, de un plumazo. Craso error, parece mentira que tenga la edad que tengo, la experiencia que acarreo y que no me conozca de qué va la vida… Parece mentira, sí, pero, ¿qué quieren? De ilusión también se vive.

Así que levanto mi copa por lo que ha de venir, que seguro que será bueno para todo el mundo (no pierdo la fe, quiero seguir siendo optimista y creer que así será, de lo contrario, estaría perdida). Si algo me caracteriza es eso, mi tesón, mi cabezonería, mi testadurez… Peleo por lo mío como una leona, como una loba, y no tiro la toalla ni loca.

Haciendo alusión a la frase tan manida de “No corren buenos tiempos para la Lírica”, podemos darnos cuenta de que la expresión es más que cierta, pero, ya cambiarán las torcas en cualquier momento.

Que este nuevo año que comienza en un ratito y medio, nos traiga mucha paciencia, mucha tolerancia, más humildad, responsabilidad y seriedad. Que también sea generoso en amor, en paz, en buenas palabras y obras; que se haga el loco y deje que el maná del cielo caiga sin medida sobre todos aquellos que más lo necesitan. Que la sinceridad y la “limpieza” de espíritu sean condición imprescindible para ponernos al frente de la tribu. Que la empatía sea moneda de obligado uso entre todos nosotros.

Y, en fin, que seamos inteligentes y honestos a la vez, que sepamos valorar lo que tenemos y cuidarlo, porque, solo cuando lo perdemos lo lamentamos. La vida es corta, pero muy intensa. Vivirla a tope y sin dañar a nadie no es tarea que no podamos cumplir. Ser felices, es nuestra obligación, y hacer felices a quienes nos rodean, nuestra recompensa mayor.
¡Y celebremos la vida!

¡FELIZ AÑO 2016! URTE BERRI ON!







Fotos, manipulaciones y Texto: Edurne. Uvas: de la cocina de mi amatxu.

jueves, 24 de diciembre de 2015

OTRA NAVIDAD MÁS...



Otra más. Y bueno, yo estando como estoy pues, muchas ganas no es que tenga, pero, no quiero dejar de ser la de siempre y por eso me resisto a caer en mi propio olvido.

Una ola, otra y otra… que vienen y van, ya se sabe, es lo que tienen las mareas. Pues eso, entre ola y ola, me asomo a tomar aire y de paso a desearles que la vida les sonría, que todos sus sueños y proyectos, vayan tomando cuerpo; que la paz y la Armonía reinen en sus vidas, y que todo sea luz, que no haya oscuridad. Ni penas ni lamentos.

Vendrán mejores tiempos para quienes estamos caminando entre nieblas, y para aquellos que realmente las están pasando negras.

La vida te da y te quita. Agarraremos lo bueno, y exprimiremos al máximo esos pequeños momentos de felicidad efímera. Guardar para recuperar en los momentos de escasez…

¡Gracias por su fidelidad de tantos años, gracias de todo corazón!

EGUBERRI ETA URTE BERRI ON!
¡FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO NUEVO!

No se olviden de ser felices, de quererse mucho y de mantener a su lado a quienes realmente nos importan e importamos.

¡Muchos besos y abrazos!





Postal: Edurne. Foto manipilación: Edurne

domingo, 20 de diciembre de 2015

LA VIDA SIGUE/SIGUE LA VIDA





La vida sigue por las sendas
que marcan el viaje de nuestros anhelos.
Siguen las manos que piden,
alzándose al cielo.
Siguen los ojos que lloran,
enjugando lágrimas y lamentos.
Siguen las bocas que piden,
llamando sin ser oídas…
Sigue la vida.
Igual.
Cruel.
Injusta.
Pero también
única
y maravillosa,
testigo de nuestro paso,
de la huella de este presente,
esperanza de un futuro
que ya viene por el túnel del tiempo
su turno reclamando.


Foto y Texto: Edurne

domingo, 13 de diciembre de 2015

ME ESCONDO EN LOS ESPEJOS



De niña,  jugaba a encontrarme
detrás de los espejos,
como una nueva Alicia
en busca del País de las Maravillas,
del que existía en mi fantasía
—hoy sé que no es cierto—.
En casa de los abuelos
había una vieja luna encastrada
en el armario de la bisabuela.
Aquel espejo me daba miedo.
Cuando me atrevía a entrar en la habitación,
oscura y fría,
notaba que alguien me observaba
desde el fondo de la luna.
Mil ojos me miraban y yo era incapaz
de salir corriendo.
Sabía que allí detrás estaba la respuesta,
allí, detrás de aquel azogue
que asomaba descarado y arrogante.
Descubrí su secreto
y por eso ahora,
yo también
me escondo en los espejos.


Imagen: Internet, Texto: Edurne

lunes, 7 de diciembre de 2015

Y SIGO CAMINANDO



Hoy llega mi vida a este puerto.
Hoy me dibujo la sonrisa en la cara.
Hoy escribo que soy feliz y
casi me lo creo.
Hoy regalo besos, abrazos
y buenos deseos.
Hoy, decido que me quiero, 
porque nadie más ve mis noches
de angustia ni
mis días en puro suspiro;
porque nadie más sabe cómo 
es esta niña que acuno hora tras hora, 
ea, ea, ea...
para calmar su llanto.
Hoy me planto en este escalón, 
el número 56, 
tan bueno como otro cualquiera, 
y desde aquí arriba
tomo aire, 
respiro, 
sí, respiro.
Hoy me hago niña grande, 
me salto los protocolos:
no fui esposa, 
no fui madre, 
ni si quiera soy abuela
¡que pudiera!
Soy mujer, 
soy persona,
soy buena gente.
Y hoy cumplo
con el ciclo de la vida, 
me llevo 56 años 
bien repletos y 
guardados en mis alforjas.




Imagen. Internet. Foto: Antonio, Texto: Edurne