miércoles, 30 de septiembre de 2009

MALOS VIENTOS



Dicen que llegaron tras la última tormenta,
con los vientos del otoño,
al soplar mareas de abandono.

Dicen que trajeron polvo en las espaldas,
que al caminar, con su paso,
mi vida quedó, sin remedio, de lodo anegada.

Dicen que fueron como un sueño,
como el alma sin reposo,
suspendidos los besos en el último recuerdo.

Dicen que la memoria me borraron,
que de mi deseo, dueños,
de tu ventana se me llevaron.

Foto: Aitor Texto: Edurne

lunes, 28 de septiembre de 2009

ASÍ ES LA VIDA


Dicen que mirar atrás es bueno a veces…

“Buscando en el baúl de los recuerdos
uuuh
Cualquier tiempo pasado nos parece mejor.
Volver la vista atrás es bueno a veces
uuuh
Mirar hacia adelante es vivir sin temor”.

Esta canción fue un éxito de los años sesenta o principios de los setenta, en la voz de Karina. Recuerdo que la cantábamos a grito pelado, y tenía su cosa, no crean, lo de cantarla así, como locas desmelenadas.

La vida es extraña, a veces se parece a este mar que miro desde mi orilla, con esas olas que vienen y van, que unas veces te traen de todo y otras te llevan también de todo. Volver la mirada hacia atrás hace bien, más que nada por eso de no olvidar quiénes somos y de dónde venimos, y es que parece que a algunos se les olvida rápidamente.

La vida pasa muy rápida, pero también lenta, o sea, que nos da tiempo para vivir una vida, o dos, o tres, y hasta cuatro vidas dentro de una misma y única vida. ¿Me entienden?

Hay acontecimientos que nos proporcionan una felicidad sin límites, o que nos producen un dolor extremo. También pasamos por la impotencia, la rabia, e infinidad de situaciones de todo tipo, incluidas las absurdas, las sinsentido, las injustas, las sorprendentes, crueles… ¡De todo!

Hay personas que aparecen en nuestras vidas y se quedan toda la vida, otras para un ratito, y algunas, después de perderse durante años, reaparecen por la vereda de nuestro caminar. La semana pasada tuve uno de esos reencuentros que te alegran el día. Veintitrés años sin ver a una persona dan para mucho. Espero no volver a perder a nadie.

Y hay momentos en los que tienes ganas de mandar todo al carajo: a los políticos, a los cínicos, a los facinerosos… Hay momentos en los que ver sufrir junto a ti, te deja en ese estado de rabia contenida, y es ahí cuando me vestiría de “Jinete Escarlata” o de “Zorro Justiciero” y saldría a poner orden en este mundo deshumanizado…

Y todavía tenemos que dar gracias por vivir inmersos en un estrés que nos devora, en una sociedad consumista, contaminante, insolidaria… ¡ja! Sí, gracias por poder sentarnos ante un teclado y reflexionar en voz alta, y poder compartir todas estas cosas con un montón de gente que, seguro que se siente igual que nosotros…

Mientras escribo esto, en la tele están dando una peli curiosa, por lo poco que estoy viendo, ya he tenido tiempo de captar la esencia: la soledad. Tres protagonistas, tres soledades que luchan por sobrevivir, cada uno a su manera: unos intentando acercarse a los otros, y otros rechazando ese acercamiento. Somos seres complejos, nuestras soledades son complejas.

Y la vida pasa. Y las personas pasan, y nuestros actos, nuestros pensamientos, nuestros amores y desamores… Los momentos de alegría, el llanto, la risa. Todo, todo pasa.

Es bueno mirar atrás de vez en cuando, y traer a nuestro presente ese pasado que nos trajo hasta aquí, porque sin él, no seríamos los hombres y las mujeres que hoy somos. Sin él y sin todos los que por nuestra vida pasaron, los que se fueron y los que se quedaron…


Foto: En Sevilla hace unos veinte años. No recuerdo quién la sacó (Amparo, Mari Karmen, Amaia o Bego).

martes, 22 de septiembre de 2009

SIN DESTINATARIO (II) "A los hijos que no tuve"




Queridos hijos, queridas hijas:

Hoy he estado pensando en el tiempo, en el pasado, en este presente y en el que todavía nos queda.
Hoy me he levantado y he pensado en vosotros.
He tratado de imaginar vuestras caras, cómo serían esos ojos que me mirarían con ansia, con alegría. Y esas manitas alzadas hacia mi cara, buscando mi boca, mientras la vuestra jugaba a encontrar mi pecho… Hasta me ha parecido escuchar vuestras sonrisas, vuestros llantos entre los deseos de mi corazón cansado.

Nunca os pude decir lo mucho que os quise, que os quiero, que os querré…
No habéis conocido mis besos, mis abrazos, ni mi amor de madre castigada…
Me he quedado sin conoceros, sin saberos, sin teneros…
Hoy he estado recogiendo mis anhelos en unos sobres de papel de otros tiempos. He guardado mis logros, mis fracasos… Os he guardado ahí, bien escondiditos, entre palabras de amor y miedos de mujer entregada.

A veces os oigo por el pasillo, cargando libros, bolsas y muchas, muchas risas…
Me descubro soltando una regañina y hasta llorando a coro por cualquier tontería.
Nadie os conoce mejor que yo, nadie sabe de sufrimientos y pesares, también de gozos y alegrías… Sólo yo os he tenido en mi mente, en mi corazón, y os he llevado conmigo todo este tiempo, he velado vuestras noches y vivido vuestros días, sólo yo…
Sé que no he sido la mejor madre del mundo, pero lo he intentado… lo he intentado y el deseo no me ha alcanzado: no llegasteis.

Hoy he visto caer la lluvia con desconsuelo, con ese sonido que me acompaña dentro del alma. Hoy os he reconocido entre mis arrugas, entre mis noches despiertas.
Y sé que os llega mi voz, por algún insondable recoveco del amor materno, sé que os llega, hasta allá donde quiera que estéis.
Y si vuestros ojos me miran, si vuestro corazón me reconoce, sabed que siempre, siempre me tendréis…

Vuestra madre que, aunque no lo sea, lo es.


Pintura: Antonio Texto: Edurne

jueves, 17 de septiembre de 2009

LETRAS, LETRAS...


Reaparezco por esta Orilla con la crónica de la presentación de nuestro libro, que tuvo lugar ayer, miércoles 16 de septiembre, en la librería La Casa del Libro de Alameda Urkijo de Bilbao.

El evento viene sucediendo todos los septiembres de estos últimos años, y en sí no debería suponer mayor alboroto para nosotros; pero no, cada año tenemos la misma emoción por dentro.

Siempre nos preocupa que todo salga bien, casi perfecto, que la gente acuda, que los textos elegidos para leer sean los adecuados para esa hora y pico que dura el acto, que el personal se anime a participar…

Ayer tuvimos un tiempo infernal, los chubascos repentinos y torrenciales que salpicaron la tarde bilbaína, casi dan al traste con la presentación. No, los “alfabéticos” somos incombustibles, y quienes nos acompañan, lo mismo.

Pero como para crónicas, ya están las de los periodistas de verdad, aquí y aquí les dejo un par de enlaces donde podrán ustedes leer y ver alguna foto.

Dentro de unos días comenzará de nuevo la aventura de escribir, de disfrutar imaginando historias cuasi reales o imposibles, y de seguir compartiendo, leyendo…

“Como la vida misma”.


Foto y extracto de relato: Edurne

viernes, 4 de septiembre de 2009

LIBERTAD


Arrastran las olas los pesares del alma
dejando surcos en el rostro de mis días.
Arados los campos del sueño están,
y con vestido de sol y mar
dejan mis pensamientos volar.

Llamo.
Grito tu nombre, LIBERTAD.
Espero con ansia tus pasos
poder escuchar.
Te llamo desde la oscura garganta
de la noche,
desde el miedo a la verdad,
sin esperanza en poderte besar…

Y es este lamento que,
preso de mis deseos,
se ahoga en la antesala del viaje
a ninguna parte,
a la estrella más lejana,
la del cielo polar.

Y este nudo en mi sangre
que me cierra el paso a tu boca,
a tus manos, a tus ojos…
Mi bella, mi amada
LIBERTAD.


Foto: Joseba Texto: Edurne