Tengo la boca llena
de hormigas.
No sé de dónde salen
tantas,
cómo se multiplican…
Entusiastas ellas,
suben y bajan por mi
garganta.
No me dejan hablar,
acallan mis quejas,
mis lamentos
Las noto.
Están ahí, no
descansan,
trabajadoras incansables
trasladan mis bilis
de un lado a otro.
Las junto a todas en
la barrera de los dientes
y cuando creo que ya
las tengo,
las escupo.
Un segundo de
tranquilidad y…
de nuevo
tengo la boca llena
de hormigas.
Imagen: Pintura de Salvador Dalí :"Rostro de hormigas". Texto: Edurne