viernes, 10 de enero de 2014

TODO DEPENDE DEL COLOR...

Del color con que se mire.
 
Yo intento ponerme las gafas de ver en cinemascope y tecnicolor, como en el cine, pero, de momento, las cosas son un poco grises, tirando a negras. Solo el poco blanco que ilumina la instantánea, pone ese toque lechoso en mi panorama.
 
Y tal vez por eso, ayer, al entrar en una librería (les juro que no era mi intención), este libro, "DEL COLOR DE LA LECHE" de la escritora británica Nell Leyshon, llamó poderosamente mi atención. El título, la asociación, libre asociación, de la leche, la portada del libro, y el recuerdo de la infancia, de tiempos más dulces...
 
 
Me he traído el libro a la clínica, aunque, si les soy sincera, soy incapaz de leer en estas circunstancias, que no son ni las mejores, ni las más adecuadas para relajarse y tener un rato de lectura tranquila...
 
Acabo de empezarlo, y ya de entrada, la primera curiosidad: no hay mayúsculas. Observen:
 
 
 
Y como no he hecho más que empezar, les dejo aquí una referencia que he encontrado por ahí...
 
Además, recuerdo que Ángeles también lo recomendó hace un tiempo.
 
 
 
 
Fotos: Edurne con el móvil
 
 

15 comentarios:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

A veces me ha pasado también a mí, entrar en una librería en la que no iba a entrar y comprar un libro por un impulso. Nunca me he arrepentido. Espero que puedas leerlo.
Besos y ánimo.

Elena dijo...

No, no es sitio para leer ni para nada diría yo, pero en algo hay que perder el tiempo. Yo leí "La carretera" de Cormac McCarthy en aquellas tristes mañanas de radioterapia.

Un beso Edurne, siempre a tu lado, ya sabes.

Asun dijo...

Zaila da holako egoeretam irakurtzea, konzentratzea.
Animo, Edurne.
Besarkada handi bat.

irune dijo...

Hola Edurne hace meses que no te sigo y veo que estás pasando difícies momentos ,te mando muchos animós .Un abrazo grandote

Máximo Cano dijo...

Lo de las minúsculas, es una moda estética. Estará bien la novela? Coméntanoslo.
Ánimo. Estamos contigo.
Besos.

Francisco Espada dijo...

Egun on, mi querida niña. No, no es lugar para lectura, pues los desvelos te sacan continuamente de las páginas del libro. Todo va a pasar pronto, si Dios quiere, y podrás disfrutar del cine, de los libros, de tus escapadas madridenses, de tu vida con mayúsculas, esas que ahora echas de menos hasta en las páginas del libro. ¡Me cachis...! Blanco y en botella.
Besos.

Nerim dijo...

Mi querida Edurne, tu entrada de hoy me ha hecho recordar una novela corta, de 158 páginas, que leí hace tiempo y que se parece mucho, hasta en el título, al libro que te has comprado y que, como es lógico, eres incapaz de leer en tus circunstancias actuales.

El libro se titula Leche de Otoño y está escrito por Anna Wimschneider. Es su autobiografía. Son las memorias de una campesina alemana, humilde y anónima, que sin ayuda de ninguna clase, supo hacer frente a la incomprensión de un medio hostil y a las consecuencias de una guerra.

De todas formas, me haré con el libro "Del color de la leche". Tengo curiosidad por conocer como se vivía una misma historia entre un siglo y otro, en paises distintos.

Un beso Edurne y todo mi cariño.


Edurne dijo...

Pues me quedan 70 páginas.
Emocionante y altamente recomendable.
Cuando la termine, la comento.

Y de nuevo las gracias por sus palabras, a todos, a los que pasan y leen y comentan, a los pasan, leen y no comentan... a todos y cada uno de ustedes!

Ahí va un abrazo!
;)

Abejita de la Vega dijo...

Me asomo a tu orilla, apuntaré ese título. Que pase pronto lo malo. Saldrá el sol, seguro.

Besos, Edurne.

Bertha dijo...

Apuntado lo tengo: gracias por tu recomendación y me alegro que aunque sea a momentitos vayas sosegándote.

Un abrazo Edurne.

Angeles dijo...

Yo no puedo leer en los hospitales y eso que me pasado de estación en el metro por ir leyendo...en ciertos sitios pierdo la concentración.
No se si es un libro que te recomendaría en estos momentos, a mí me gusto, ya lo sabes. Mucho ánimo y un abrazo grande.

Edurne dijo...

Ya la he terminado.
Ahora mismo.
Se queda una así, impactada.
Aunque...
He de confesar que sabía lo que iba a pasar.

Lo que pasa en esta novela, es algo que sigue pasando, lamentablemente.

Yo la recomiendo, sí, está escrita en un estilo muy directo, en esa especie de monólogo interior o escritura hablada, a veces, tal vez, hasta simplista, pero porque el narradora es la protagonista, una niña que no sabe leer ni escribir, hasta que aprende y cuenta su historia...

Pues eso, 174 páginas muy intensas. Merece la pena.

Y gracias!
;)

TORO SALVAJE dijo...

Que duro es Edurne.
Ánimo,ánimo y más ánimo.

Besos.

Anónimo dijo...

Hola Edurne,lo siento por lo que ha pasado.Acabo de enterarme y me quedo sin palabras,Que descansa en Paz.Ahora se enconara entre los Ángeles.Entiendo su dolor ,yo he pasado muy temprano ,muy joven por este camino y lo conozco.No hay nada que hacer,las heridas se van ha cicatrizar poco a poco y se quedaran solo con los recuerdos. Un abrazo muy forte y muchos besos de parte de Ioana y Denisa.

Edurne dijo...

Muchísimas gracias Ioana!

Es un dolor terrible.
Un beso y otro para Denisa!!