viernes, 20 de julio de 2007

CERRADO


Señoras y señores, distinguido público... Es hora de cerrar el chiringuito.
Lo sentimos pero, nuestro personal tiene, por convenio, derecho a un periodo vacacional pagado, el cual se disponen a disfrutar mismamente...¡ya!
Agradecemos la atención prestada durante todos estos meses, y pedimos disculpas por este parón de... ¿diez o quince días más o menos?
Pero estaremos encantados de recibir sus mensajes, sugerencias y demás cantinelas en nuestro buzón de orilla urgente, es decir, en esta misma ribera.
Prometemos contestar a todos los mensajes, con la misma dedicación y gracejo de que hemos hecho gala en este corto tiempo en que hemos compartido dimes y diretes, aconteceres, historias y pensamientos...
Atentamente, La Dirección.
Y feliz descanso estival a todo el que vaya a tumbarse panza arriba en alguna playa, a caminar horas y horas por parajes desconocidos, a tirarse a la bartola en el sofá de su casa...
¡FELICES VACACIONES!
Cartel: Edurne

LA CUADRI


Y escribe que te escribe. Lee que te lee. Ríe que te ríe.
Dicen que la cuadrilla que ríe unida, permanece unida.
Esta cuadri, es la Cuadrilla Alfabética. Faltan, falta Marilú, la risueña viajera. Falta la Directora de la banda, Ana, que es la que dispara la foto...
Foto que está levemente manipulada con unas ligeras pinceladas, por eso se ve "rara", no es que tengan problemas de visión; si pinchan ustedes sobre ella, lo apreciarán.
Los "bokatas", son idea de Silvie, la internacional, que muy aguda ella, sobreimprimió semejantes reflexiones.
Y como casi todos estamos en las puertas de... (ya sé que tenemos otras puertas pendientes por ahí) de las vacaciones; algunos ya las hemos traspasado, y otros a punto de hacerlo...
Pues eso, una sonrisita per tutti desde esta orilla edurniana.
Muxutxuak guztioi eta ondo pasa!
Foto: Ana Manipulación: Edurne Bocadillos: Silvia

ALBORADA


Juego de nubes al alba azul
y dorada de la mañana.
Espumas y conchas que reposan
en la orilla de mis pasos dormidos,
vienen a traerme fresca
la brisa y cálida la hora
de la partida.
Esta hora de despedida,
este adiós de la amanecida...
Despierto mi cuerpo,
despierto mi alma,
quieta,
callada...
Y dejo que entre en mí
toda la fuerza del canto
de este mar doliente.
Cormoranes, pececillos
de mil colores,
caracolas y corales...
que agarrados a mí,
viajarán en mi maleta
de los recuerdos,
en mi corazón transeúnte,
latiendo con mi sangre.
Pintura: Aitor Texto: Edurne

AVE MARÍA PURÍSIMA...




Sin pecado concebida. Así reza el protocolo.

Porque habrán de saber ustedes, que nos encontramos ante un torno de los de convento de clausura de verdad.

¿Y si los tornos como éste, hablaran? ¡Ayyy, la de cosas que nos dirían!


Porque... vamos a ver, si pensamos un poco , lo primero que nos viene a la cabeza es el asunto de las criaturas abandonadas y depositadas en el torno de un convento, junto a una escueta nota, y en el mejor de los casos con una canastilla, alguna inicial bordada en sus ropitas, con un nombre en concreto...

Hijos de un desliz que nunca debió ocurrir. Hijos del pecado, que se diría en tiempos pretéritos. En todo caso, hijos del amor, de la pasión... Aunque sí, me corregirán ustedes, y con toda la razón, también podían ser hijos de algún acto indebido. Y no quiero ser más explícita, que al buen entendedor... pocas palabras.


También nos viene a la cabeza la ofrenda de huevos (en este caso, a las Clarisas), por lo de que haga buen tiempo, que luzca el sol, y que la santa interceda ante el Altísimo, en la fecha pedida: bodas, bautizos, comuniones...

Pero de estas historias meteorológicas, me parece a mí que... que no hay nada que hacer.


Y otras cosas que se pueden dejar en un torno: dulces, cartas, ropa, comida....

Por un lado se deposita, por el otro se recoge. El mecanismo es bien sencillo. Intercambio. Y el torno es el medio de comunicación entre los y las de Intramuros y Extramuros.

Dos mundos.


La foto me la ha prestado la Hermana Tornera de mi convento, toda ufana ella por haber conseguido plasmar con un artilugio poco menos que diabólico, la magia de esa vía de comunicación hacia la paz de nuestras vidas de "ora et labora".


Seguro que se nos ocurren historias para contar, historias cuyo protagonista sea un torno...

Yo tengo una, cualquier día de estos la cuelgo en este escaparate, aunque muchos ya la conozcan.


¿Qué estará ocurriendo ahora en este torno, por ejemplo?
Con Dios, hermanos.
Foto: Ana

miércoles, 18 de julio de 2007

¿SE ME HABRÁ OLVIDADO?



Dicen que estas cosas no se olvidan. Tengo mis dudas.
Este próximo domingo, 22 de julio, a la sazón cumpleaños de la que me parió, cumpliré yo también un aniversario, el de mi no conducción. Veintidós también. ¡Veintidós años sin conducir, sin ponerme frente a un volante!

Dicen que en cuatro días me pongo al día. Sigo teniendo mis dudas.
Si ya no recuerdo ni cuál es el pedal del acelerador, ni el del freno...

Yo tenía un Seat 127 de última generación, BI 1913 T, que se llamaba Mafalda, verde, todo verde, precioso él...
Eso sí que no lo olvido, ni la matrícula, ni el color...

Pero yo he seguido renovando mi carné, católicamente cada diez años (ahora parece ser que hay que hacerlo cada seis, cuestiones de la edad), y guardándolo.
Tan bien guardado que hace unos meses me tuvo angustiada su "desaparición".

Se ve que me dio el punto, y me puse en lo de recuperarlo, sacarlo de su refugio, tocarlo... esas cosas, esas tonterías que se hacen con los recuerdos.
El caso es que, ¡oh, cielos! Mi preciosa y preciada papeleta rosada no estaba. No al menos en donde debía estar.

Han sido unos meses, dos o así, de auténtica locura y obsesión. Algunos ya saben que me entró la fiebre del carné. Era como si de pronto tuviera que conducir y no pudiera hacerlo por culpa de la desaparición del dichoso carné.

Busca y rebusca, he revuelto toda mi seccción de papelería, nueva y añeja, he descubierto cosas de las que ya no tenía ni la más remota idea de que estuvieran guardadas...
He mirado en los sitios más insospechados. En una palabra: me he desesperado (tres, ya sé que son tres palabras...).

Pero... cuando una menos se lo espera, de pronto, se le enciende la bombillita... ¡y héte aquí que aparece! ¡Huy, que ilusión, saltos de alegría, apareció, apareció!
Aquí lo tienen. Ya dudaba hasta de su existencia, ya creía que había sido un sueño, un sueño rosado...

Y ahora, ¿qué?
Ay, eso mismo me pregunto yo. Me quedan dos años hasta la nueva renovación, tal vez... ¡quién sabe! Aunque veintidós años son muuuuchos.
Dicen que veinte años no son nada, que...


Foto: Edurne

lunes, 16 de julio de 2007

EL REGALO DE VINCENT



El amigo Vincent, ya saben, el de la oreja... nos deleita de nuevo con su intenso mundo de color.

Se podría decir que estas obras que se exponen en el Thyssen en estos días, son obras menores. Según se mire. Porque aquí estamos los entusiastas que aún admitiendo que no tienen la fuerza de los "van gogh" que nos hacen estremecer, no dejamos de reconocer su valía.

Son paisajes de su última época, de sus dos últimos meses de vida, en Auvers. Paisajes más bien bucólicos que atormentados.

Su pincelada sigue siendo la seña de identidad que hace inconfundible sus cuadros. Pincelada cargada de sentimiento, de color, densa, rápida y nerviosa, pero intensa...

Si alguien se va a pasear por Madrid, que recuerde que hasta el 16 de septiembre tendrá la posibilidad de visitar este pequeño remanso de paz entre tanta agitación.

Estas casitas en Auvers, son como un regalo, un pequeño presente, cálido, descuidado y alegre...

Postal: Thyssen

jueves, 12 de julio de 2007

DESDE MADRID CON AMOR (Crónicas del Foro)

Vaya con la señorita Cibeles, castiza donde las haya. Pues sí, vaya con la Cibeles, con sus leones, su carro, su fuente, su cielo de Madrid...

De Madrid al cielo, eso dicen los "gatos" del lugar. No sé yo si será para tanto, porque ya se sabe, cada cual arrima el ascua a su sardina, y a los gatos, que se sepa, el pescadito, de siempre les ha gustado...

Madrid está que bulle, como siempre.
Bulle de gente, foráneos y de más allá de sus fronteras.
Bulle de obras, las de Doña Espe y las de Don Gallardón, que tanto monta, monta tanto... y al quite y que no me lo quiten.
Bulle de calorcito, del de verano-verano y del humano.
Bulle de coches, de motos, de edificios altivos, de orgullo capitalino...
Bulle.

Y esta Cibeles pétrea e impertérrita, ahí, con la mundana compañía de transeúntes acelerados, conductores acalorados y cabreados, turistas despistados y alocados... Con su amigo Neptuno en la misma situación, allá, un poco más abajo.
Esta Cibeles de sonrisa misteriosa, de aplomo y pátina de divinidad con contrato indefinido -de momento, que nunca se sabe-.
Cibeles convertida en símbolo (¡si ella hablara!), ¡ay, Cibeles del alma mía!

Paseo por este Madrid que me tiene en régimen de acogida. Y Cibeles que me mira, y Cibeles que me guiña... calma, mi niña, ¡que a todo se acostumbra una en esta vida!
De vigía, guardesa y reina de la noche montada en regia calesa, Cibeles que espera. Espera que el hechizo se deshaga y así poder emprender veloz carrera por toda la Tierra, para sembrarla de vida eterna...


Foto: Internet




jueves, 5 de julio de 2007

DÍAS DE RADIO


Dicen que es magia, que la radio es mágica. Dicen, y tienen razón.
Ayer estuvimos en la radio. Ayer estuvimos en la radio e hicimos magia, jugamos a ser magos. Esparcimos un poco de esos polvitos mágicos de abracadabra pata de cabra... y nuestras voces llegaron a un montón de lugares.
Dicen que es magia. Comunicarse así, por medio de las ondas, es algo que tiene mucho de mágico, de inexplicable. ¿Por dónde salen, por dónde van, por dónde entran nuestras voces? ¡Ayyyy, misterio!
Ayer estuvimos en la radio, ¡sí! Y no nos sentimos incómodos ni timoratos.
Nos "calzamos" los auriculares y... hablamos, leímos, reímos.
El tema era nuestro Taller, el libro, las demás actividades que une a personas tan diversas, la amalgama que suelda caminos venidos de acá y de allá...
Ayer estuvimos en la radio.
Juanma jefe de pista, nuestra Ana con la varita, y nosotros tres: Iziar, José y esta servidora, de funambulistas, trapecistas y contorsionistas, jugando con las palabras ajenas, con las nuestras...
Dicen que las palabras unen, y dicen bien.
Palabras escritas, palabras dichas, reídas, masculladas, enfurecidas, remilgadas, engoladas, sofocadas... palabras al fin y al cabo.
Dicen, dice, decís, decimos, dices... digo.
Foto: Edurne