Hoy es tu día, todavía es tu día, faltarán menos de dos horas para que acabe esta jornada tan especial.
Hoy has estado contenta y superemocionada. Para nosotros eso es el mejor de los regalos.
Casi no llego a hacerte este homenaje de todos los años, tú mejor que nadie sabes que no me alcanza la vida, que los días y las noches son cortos para mí... ¡Pero aquí estoy!
Y como no me da la cabeza, ni el tiempo, ni la inspiración... recurro a este viejo poemilla de agradecimiento que siempre saco a relucir cada x. Es que me parece que no hay mejor forma de decirte todo lo que te quiero, amatxu.
Sé que hoy has sido feliz, y eso para mí es suficiente.
Maite zaitut/zaitugu, amatxu!
ZORIONAK!
¡Ahora a por los 90!
TENGO UNA MUÑECA VESTIDA DE AZUL
Te doy las gracias
porque un día,
tus carnes se abrieron
para darme a mí la vida.
Porque sufriste
con paciente espera
a que mi llanto cesara.
Porque dejaste
tu piel en mi piel.
Porque tu sudor
fue formando mi sangre.
Porque tu corazón
de madre, se hizo
corazón de niña.
Porque me pariste
un lluvioso día,
con todo el amor y
con todo el dolor…
¡Te doy las gracias,
madre mía!
Fotos: De la memoria familiar. Texto y poemilla adolescente: Edurne.
Hoy ha cumplido 89 años la señora Edurne, mi amatxu. Cada día la quiero más.