domingo, 29 de mayo de 2016

TE BUSCO, AMOR




Creció en mi vientre tu semilla
y di a luz un amor enfermo,
sin yo saberlo.
Lo cuidé durante años,
velando sus penas y alegrías.
Me hice mayor sin soltar
nunca su mano, que,
sujeta de la mía siguió caminando
por veredas por mí desconocidas.
Se hizo grande y fuerte
con mi cariño.
Le di lo mejor de mí:
mi aliento y mi vida.
Pero él cercenó poco a poco,
con sutil engaño,
la ilusión que yo guardaba
muy dentro de mi corazón,
rompió la cadena invisible
que a mí lo unía,
y voló hacia otros lares
con toda la savia que
de mi ser se llevó.
Hoy busco entre las nubes,
escudriño los senderos,
como loca voy y vengo.
Pregunto a los que por mi lado pasan,
por si lo han visto,
perdido,
llorando,
como lo hace un niño,
por haber soltado mi mano,
por haberme olvidado...

Foto y texto: Edurne

3 comentarios:

Francisco Espada dijo...

Igual hablas del amor que del desamor, de los zurcido o lo roto; pero lo apacible es más severo en tus labios.

Besos.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

es duro despedir así a un ser querido

Edurne dijo...

PACO:
Es la vida misma,que unas veces nos da, y otras nos quita.

¡Un beso y un abrazo, amigo mío!
¡Y gracias, siempre!
;)

PEDRO:
Desde luego que sí, muy duro, pero aunque nunca esperemos encontrarnos en situaciones así, hay que prepararse para todo en esta vida.

Besos.
;)