martes, 18 de marzo de 2025

MAYORÍA DE EDAD ORILLERA

 


Dieciocho años, sí. Ahí tenía yo dieciocho añitos, era monitora de tiempo libre los sábados tarde y domingos, trabajadora de jornada completa en una casa (explotadísima) y estudiante de Magisterio por las tardes-noches. Siempre rodeada de chavalería...

Y hoy se cumplen 18 años desde que la Orilla es Orilla. Pero... Pobre Orillita, está muy triste y alicaída ella. Por eso lo de festejarla un poquito, para que no se le baje aún más el ánimo. ZORIONAK, ORILLA!

La orillera al mando no tiene el horno para bollos. Su vida se ha ido totalmente al carajo, pero esto es una forma de recordar que también fue otra y tuvo otra vida.

Ahí andamos, sin saber hasta cuándo se podrá aguantar esta situación.

Hoy cumple esta Orilla y hoy cumplo yo con ella, o sea, que le hago los honores, no me olvido de su existencia, y es por eso que no pienso cerrarla. Aquí está, bajo mínimos pero sigue viva.

Muchísimas gracias a tod@s l@s que seguís pasando por aquí de vez en cuando, en silencio o chapoteando un poquito. Ya nos conocemos de hace mucho y somos expertos en esto de vivir, sabemos de qué va la cosa, y que lo mismo la ola está ahí arriba (la famosa cresta de la ola) que apenas llega espuma a la orilla...

Levanto mi copa, sin muchas fuerzas, la verdad, pero la levanto. Por la vida. Txintxin. Y que sigamos encontrándonos por estos pasillos virtuales. Cuídense mucho.

ESKERRIK ASKO!



Foto: De mi memoria fotográfica particular. Dibujo de La gran ola de Kanagawa: Internet. Número 18: Internet. Texto: Edurne





jueves, 23 de enero de 2025

HOY

 


Hoy,

tras nueve meses de un embarazo no deseado,

paro esta hija del dolor.

Nueve meses alojada en mi  corazón.

Nueve meses alimentándose de mi llanto,

excavando en mis recuerdos,

azuzando las noches en blanco,

los días en negro…

Y ahora no sé qué hacer con ella.

No tengo con qué amamantar su hambre,

ni sus ansias por crecer.

Aún le queda tiempo para alejarse de mí.

No ha pasado un año,

no está preparada para salir al mundo,

todavía necesita de mis lágrimas,

de mi amor…

Nueve meses de soledad,

Nueve meses de incredulidad.

Nueve meses y ya sé que es verdad

que nunca volverás,

pero que nunca te marcharás.

 

Hoy, 23 de enero, hace nueve meses que falleció Antonio. El tiempo de un embarazo. Hoy es el parto.

Foto: de su hijo Unai, sacada el 22 de enero de 2012 en Getxo. Felicidad: Antonio y Edurne. Texto: Edurne